domingo, 4 de marzo de 2012

Venecia: un cuadro que representa a una ciudad.

Este cuadro de Tiepolo resume a la perfección lo que Venecia significa para mí. Desde el día que supe que iba a hacer este viaje me dije que tenía que escribir algo sobre Venecia en el blog. Ya la había visitado y su fuerza  me atrapó desde el mismo momento que puse pie en ella por primera vez allá por 1991. Ese aire decadente, brutalmente nostálgico, canallamente marinero me fascinó y me sigue fascinando. Hice caso de la recomendación de Paco Medina y me propuse visitar el Palacio Ducal ya que en otras ocasiones la economía no me dio para poder abonar el desorbitado precio de la entrada. Así lo hice. Y la verdad es que quedé maravillado. ¡Qué majestuosidad en pleno medioevo! Ahora comprendo lo del término de República Serenissima. ¡Cuánta belleza y cuánta simbología encerrada en un edificio!

Y héteme aquí que de pasada, entre sala y habitación, entre Tintoretto y El Varonés, me encuentro en un trípode un cuadro que de un solo vistazo reproduce mi sentimiento hacia Venecia: "Neptuno ofrece dones a Venecia". Esta alegoría del genial Giovanni Battista me sirve como anillo al dedo para expresar lo que la ciudad del agua me transmite: poderío, riqueza, superación, belleza... Tanto es así que es el mismísimo Dios del Mar, Neptuno, es el que se ofrece a verter su cuerno lleno de regalos a una hermosa señora (con corona incluida), Venecia, que se apoya sobre el león (asociado a San Marcos, omnipresente en toda la ciudad).

Así me veo yo, arrodillado, apabullado ante tanto esplendor a pesar de que a veces tengo la sensación de que estoy en  un parque temático lleno de turistas que se mueven en riadas de un sitio para otro, de atracción en atracción. Ahí está el trabajo del buen viajero, en saber encontrar ese momento de deleite, ese lugar que te cautive. Yo aunque sin ser todavía buen viajero, los encontré y con esto de las nuevas tecnologías y las redes sociales me he decidido a compartirlo con Vds. Fue el miércoles 29 de febrero a eso del ángelus, en la Sala de las Cuatro Puertas del Palacio Ducal. Gracias Paco, gracias Giovanni Battista Tiepolo. Lo único malo es que si quieren repetir mi experiencia van a tener que esperar cuatro añitos. Cosas de ir a Venecia en un año bisiesto.

2 comentarios:

  1. Interesante y original forma de expresar lo que transmitio venecia =) Y hoy hace una semana que acabo el viaje, una de las semanas mas rapidas de mi vida T_T

    ResponderEliminar
  2. Si este blog va a seguir vivo durante mucho tiempo gracias a las aportaciones y experiencias de quienes estuvisteís allí, no sólo vamos a disfrutar aprendiendo nuevas cosas sino nuevos sentimientos. Animo a los jóvenes que disfrutaron de este viaje único, a que escriban sus experiencias y las compartan.

    ResponderEliminar